Por: Latinus
Fotografía: Reuters
La economía de Estados Unidos se contrajo nuevamente en el segundo trimestre, un 0.9% a tasa anual, lo que hace crecer los temores de que el país pueda entrar en una recesión.
De acuerdo con las cifras del Departamento de Comercio, el PIB estadounidense cayó 1.6% en el primer trimestre de este año.
La contracción se registra en medio de un agresivo endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal para combatir la alta inflación, lo que podría avivar los temores del mercado financiero de que la economía ya estaba en recesión.
Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que el PIB se recuperaría a una tasa del 0.5%. Las estimaciones oscilaron entre una tasa de contracción del 2.1% y un crecimiento del 2.0%. La economía se contrajo a un ritmo del 1.6% en el primer trimestre.
La segunda caída trimestral consecutiva del PIB cumple con la definición estándar de recesión.
Sin embargo, la Oficina Nacional de Investigación Económica, la autoridad oficial de las recesiones en Estados Unidos, define una recesión como “una disminución significativa en la actividad económica que se extiende por toda la economía, que dura más de unos pocos meses, normalmente visible en la producción, el empleo, el ingreso real, y otros indicadores”.
El crecimiento del empleo promedió 456 mil 700 por mes en el primer semestre del año, lo que está generando fuertes aumentos salariales. Aún así, los riesgos de una recesión han aumentado. La construcción y ventas de viviendas se han debilitado, mientras que la confianza de las empresas y los consumidores han caído en los últimos meses.
La Casa Blanca está rechazando hablar sobre recesión cuando busca calmar a los votantes antes de las elecciones de mitad de periodo del 8 de noviembre, que decidirán si el Partido Demócrata del presidente Joe Biden retiene el control del Congreso del país.